Disfrutar De Un Baño Relajante cuando llegas a casa agotada y sin energía, después de la rutina y el estrés de todos los días, es la mejor manera de relajarte, quitarte las tensiones y de olvidarte de mundo es darte un baño placentero.
Disfrutar De Un Baño Relajante requiere del ambiente adecuado. Probablemente el ambiente de tu baño no sea ni parecido al de un Spa, pero lo con estos consejos que te damos puedes convertirlo en el mejor de todos.
Consejos Para Disfrutar De Un Baño Relajante
Si tu baño no dispone de una iluminación tenue y suave, puedes ambientarlo con velas aromáticas, preferiblemente de aroma de lavanda, que te ayudaran a reducir el estrés.
Disfrutar de una música relajante mientras estas tomando el baño te ayudara a aislar tu mente y olvidarte de tus preocupaciones por un tiempo.
Para evitar meter los dedos mojados en las páginas de tu libro o tener que bajar al suelo para recuperar la copa de vino que estés tomando mientras estas disfrutando de tu baño, lo mejor es tener una bandeja de bañera con estilo donde puedas dejar los objetos.
La temperatura óptima del baño debe ser de unos 30 grados centígrados, pero no mucho más caliente, para así poder potenciar los aromas y beneficios de los aceites que utilices. El agua caliente y el vapor hacen que los poros de tu piel se abran y sean más receptivos a las propiedades terapéuticas de los aceites esenciales y las sales de baño.
Disfrutar De Un Baño Relajante con aceites esenciales, te ayudara a despejar tu cabeza y eliminar tensiones. Aquí te damos unos cuantos para que elijas. Es aconsejable añadir de 10 o 12 gotas de aceite esencial para empezar, más tarde si lo ves necesario puedes añadirle más gotas.
Aceite de Lavanda. Tiene propiedades sedantes y su aroma floral y fresco calma los nervios.
Aceite de Azahar. Tiene propiedades sedantes y calmantes además de favorecer el sueño y combatir el insomnio.
Aceite de Sándalo. Favorece la relajación, aumenta la capacidad de concentración y la memoria.
Aceite de Rosa. Efectos relajantes.
Aceite de Romero. Posee efectos relajantes, curativos y desinfectantes.
Aceite de Eucalipto. Tiene propiedades estimulantes y balsámicas.
Aceite de Menta. Es estimulante, analgésico y refrescante, recomendado para las épocas más frías del año.
Aceite de Ciprés. Ayuda a la relajación.
Aceite de Benjuí. Tiene un gran efecto sobre el estrés, los ataques de ansiedad, favorece la relajación y mejora el bienestar en general.
Aceite de Jazmín. Beneficia a conciliar el sueño, calma la ansiedad y aumenta la autoestima.
Algunos aceites esenciales pueden provocarte alguna reacción adversa. Debes consultar con tu dermatólogo antes de utilizarlos, por si pudieran darte algún tipo de alergia.
Si estas embarazada y durante los periodos de lactancia no es aconsejable utilizarlos, ni tampoco por niños menores de 2 años.
Prueba y modifica con diferentes aceites hasta que des con el aroma que más te guste, aunque al principio te cueste.
Para que tu baño sea perfecto añade sal marina, (no tiene porque ser perfumada). La sal marina añadida al agua tiene efectos tranquilizantes, activa la curación de enfermedades de la piel, calma las zonas inflamadas y mitiga el dolor de los músculos y articulaciones.
Durante los primeros minutos no debes hacer absolutamente nada, solo relajarte, cerrar los ojos, respirar profundamente y dejar tu mente en blanco. Más tarde, con una esponja de crin y un exfoliante que sea natural masajea tu cuerpo con movimientos circulares, evitaras que se seque tu piel, que este más suave y además eliminaras las células muertas. También puedes ponerte una mascarilla en tu cabeza para acondicionar tu pelo mientras disfrutas del baño.
Después de Disfrutar De Un Baño Relajante es aconsejable acabarlo dándote una ducha con agua fría para aumentar sus efectos y estimular la circulación, y además favorecerás la eliminación de toxinas.
No permitas que una ráfaga de aire frío al salir del baño arruine tu estado de calidez y satisfacción, calienta la toalla en el radiador para que cuando salgas del baño puedas pasar de una forma de comodidad a otra. Haz lo mismo con tu albornoz y zapatillas.
Una vez te hayas secado, completa el ritual aplicándote crema hidratante por todo tu cuerpo, ya que los poros de tu piel estarán abiertos y la absorción será mayor.
Disfrutar De Un Baño Relajante, requiere de calma y desconectar completamente. Nunca debe exceder más de 20 o 30 minutos, ya que entonces podrías sentir debilidad, tu piel empezara a arrugarse y el agua se enfriara. Lo ideal es darte el baño relajante antes de irte a dormir, para tener un sueño reparador.